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Confieso que he vivido...

Actualizado: hace 4 días

...se titula parte de la obra de Pablo Neruda. Creo que además un poema de él se llama así, pero lo tengo en duda pues lo he buscado y no lo he encontrado. Es un poema que me marcó tremendamente a mis 21 años. Lo leí cuando estaba en la universidad, en los primeros semestres, antes de que iniciara este milenio.


Este poema que leí es un testimonio de vida del poeta en el cual manifiesta cierta inconformidad por una gran cantidad de comportamientos que tuvo y otros que le hubiera gustado tener. A sus 83 años, cuando está escribiendo este poema, parece que a Pablo le está haciendo falta algo a pesar de ser una persona que ha tenido éxito en su carrera. John Maxwell también habla en uno de sus libros da testimonios similares de personas ya entradas en sus años dorados, estas personas también manifestaban que lo que más les pesaba al final de todo era no haber hecho lo que debieron.



Para mi fortuna creo que leí el poema de Pablo Neruda a tiempo y me tomé muy en serio sus palabras. Tan en serio que me gustaría pasarle una cuenta de cobro por semejante consejo. Específicamente él decía que si volviera a vivir sería menos calculador, asumiría más riesgos, andaría mas veces descalzo y bajo la lluvia, le hablaría a mas gente y visitaría más lugares.


Al final, creo que el autor nos quiere impulsar hacia lo que el está reconociendo que puede estar a nuestro alcance para que nuestra vida sea plena y esté llena de acontecimientos memorables. El se está sacrificando a sí mismo poniéndose en evidencia para que no nos pase a nosotros. Muy valioso gesto. Si por lo menos una persona le presta atención a este legado ya valdría la pena haberlo hecho.Voilà, yo le hice valer el gesto a don Pablo!


Solo siendo lo irresponsablemente necesario y aprovechando todas las facilidades que me ofrecieron mis padres y la vida, lo he hecho. Estudié lo que quería, donde quería, trabajé en lo que quise y me dediqué a lo que más me apasiona. Me casé con quien decidí y tengo dos hijos hermosos. Me divorcié y me he quebrado en mis emprendimientos y lo sigo intentando. He aprendido toneladas de lecciones en áreas duras y blandas del comportamiento humano. Todo fue mi decisión y lo he vivido intensamente. Mucho aprendizaje y momentos memorables.


En este momento de mi vida, a los 46 años, también podría darles un mensaje similar al de Pablo Neruda, es decir, una lista de consejos sobre lo que no se debe hacer en la vida! Eso sí, con una enorme diferencia, todas esas experiencias han sido momentos memorables que han llenado mi vida de una riqueza intangible que me dan mucha felicidad. Ninguna de esas experiencias viene acompañada de reproche alguno. Bueno, para confesarme aquí, solo me reprocho una cosa hasta el día de hoy, que cuando tuve 16 años, no tuve el valor de decirle a una hermosa chica en mi High School en Kansas que me gustaba un montón.


Esto fue durante mi año de intercambio estudiantil. Ya lo saben. Entonces, siendo optimista, me queda cerca de la mitad de mi vida por vivir y les CONFIESO QUE HE VIVIDO.


En esta segunda mitad de mi vida me he preparado para algunos cambios que vengo trabajando hace un par de años. Quiero tener una vida con un poco menos de riesgos y un poco más de estabilidad. Si antes me parecía bien una vida estilo montaña rusa, hoy busco más un viaje tipo crucero. Eso sí, quiero seguir viajando, conociendo, aprendiendo y tomando algunos riesgos. Ese es mi ADN. Pero ese soy solo yo. Tú ¿Qué piensas?




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